El Siervo de Dios, Pastor Enmanuel Kim, Pastor Principal de la Misión Buenas Nuevas Perú, junto a su esposa, misionera Sara Song, empezaron a conocer las iglesias a nivel nacional y la ciudad de la amistad fue la primera que recibió la gracia en recibirlos el jueves 20 de marzo, dejando en ellos la promesa para el corazón de los miembros de la iglesia. Al día siguiente viajaron a Trujillo, dónde los hermanos los recibieron con felicidad.
En Chiclayo, los hermanos recibieron al matrimonio de forma acogedora, después de conocer las instalaciones junto a los líderes y ministros de la zona, los hermanos tenían la oportunidad de tener la comunión con los Siervos.
El Servicio Especial se realizó con la presencia de alrededor de 40 hermanos, de los cuáles dos de ellas testificaron. La primera fue la Diac. Bertha Iparraguirre que expresaba la gracia que recibe en su cargo trabajando para la iglesia recibiendo la guía del Siervo; la hermana Nery Ccamerccoa agradeció por la salvación de Jesucristo y por la nueva vida en Cristo Jesús.
El Sermón dirigido por el Pastor Enmanuel Kim se inició con el libro de San Juan 6:1-12, enfocando principalmente la vida de Felipe como discípulo de Cristo que anunciaba el evangelio al lugar donde fuera, un día fue enviado a Samaria donde podía tener buena posibilidad cerca de los hermanos. Cuando Jesucristo lo envió al desierto no se negaba a pesar de las dificultades que representaba este lugar y Dios le permitió anunciar el evangelio a un eunuco etiope.
A pesar de las dificultades y problemas, dónde Felipe era enviado solo se enfocaba en predicar el evangelio considerando en todo esto que su vida era responsabilidad de Jesucristo quien lo envió y dirige la iglesia teniendo la misma misión, sin importar si el lugar o ciudad era grande o pequeña, o por la falta o abundancia del alimento, solo esperando la voluntad de Dios quien envía a sus ministros y siervos a distintos lugares anunciando el evangelio y recibiendo la bendición.
Finalizando expresaba que en San Juan 6 aparece la historia de la alimentación de los cinco mil, en donde cinco panes y dos pececillos cuando estaba en la mano de un niño solo alimentaba a cinco personas, pero cuando pasó a la mano de Jesús alimentó a cinco mil. Nosotros somos cinco panes y dos pececillos en la mano de Jesucristo, podemos anunciar el evangelio, dar vida y sembrar esperanza a miles; cuando hacemos esto Jesucristo es responsable de nuestra vida, de nuestra familia, de la iglesia, Jesucristo es responsable de la Misión Buenas Nuevas.
Antes de despedirse Pastor y su esposa, misionera Sara Song, disfrutaron junto a los hermanos de la cena y expresaron su agradecimiento para con los miembros de la iglesia diciendo: «Una pequeña parte de mi corazón se queda en Chiclayo. Voy a volver pronto.»
Por otro lado, el día viernes, en la ciudad de la eterna primavera, los obreros y diaconisas fueron los primeros en reunirse con el Pastor Emmanuel Kim.
En el Culto Especial el Pastor compartía por medio del libro de Romanos 11:26. Mencionando que Dios así como estableció la promesa de que todo el pueblo de Israel será salvó, de la misma manera será con el pueblo de Trujillo. De esta forma animaba a anunciar el evangelio teniendo la seguridad de que Dios trabajará por medio de su promesa.
Los hermanos de las Iglesias quedaron agradecidos y satisfechos por la visita del Siervo, la palabra que recibieron seguros del lugar donde Dios los tiene, junto al Siervo.